Esquema de la ruta, Al S. Carlos y el Samelar desde Liébana, un buen palizón con 1900 m. de desnivel sin anestesia ni ná.
La misma tarde en que hecho una mierda, regresaba de La Canal de Lechugales, quedaba con Mercedes en Potes, con la intención de hacer alguna "cosilla" (tiemblo) cerca del pueblo, el caso es que mientras me ventilaba una pizza "al Cabrales" de tamaño especial, una palmadita en la espalda me saca de mis ensoñaciones y dice.."Joer tío, ¿de dónde vienes?, ¡¡si estás hexo una mierda!!...Calla, no me hagas hablar que estoy muy dolorido.
Después de salir por el "barrio húmedo" de Potes, con alguna copina de orujo de más, al más puro estilo Genarín, decidimos al día siguiente atacar el Sagrado Corazón desde Argüebánes, pueblo famoso por sus destilerías de orujo (¡¡Por Dió!!), sin saber siquiera, el palizón que nos íbamos a meter...
Salimos de Argüebánes por una pista forestal bien trazada, por un bosque de encinas al principio, que se transforma en un denso robledal y la final...
Da paso a un hayedo por el que se dejan ver las cumbres de Picos.
Después de unas cuantas vueltas (hay cantidad de caminos sin salida o cortados), llegamos a este claro, no hay duda, esta es la pista buena, procedente de Colio, que nos llevará a la base de Los Puertos de Potes, el Samelar y Sagrado Corazón aperecen lejísimo, y llevamos dos horas pateando ya.
Después de unas cuestas que ríanse del Angliru, llegamos a Los Puertos de Potes, bajo la pared sur del Samelar.
E iniciamos la monótona subida a la Canal del S. Carlos.
Bajo la atenta mirada de un viejo conocido, El Curavacas.
la suave escalera de subida al Samelar.
Aunque media hora antes habíamos estado entre tinieblas en el Sagrado Corazón.
Viendo el Macizo Central de Picos, el tiempo se torna frío por momentos y parece anunciar un cambio...
...Sobre las águilas...
Desde la cumbre del Samelar iniciamos un suave descenso que nos deja en un paso natural llamado La Hendida.
Por el que bajamos de nuevo a Los Puertos de Potes.
Y decimos adiós a este paraje encantado.
La Sierra de Peña
Sagra, lugar al que quisimos subir al día siguiente, peor una lluvia torrencial nos hizo abandonar para mejor ocasión...
