Corona del Pinar (2068 m.).

La Corona del Pinar es una ascensión fácil pero sumamente gratificante, proporciona unas magníficas vistas sobre la Vall de Boí y Aigües Tortes, así como hacia el Port de La Gelada y las montañas de Senet,  esta ruta no tiene ningún problema, en todo caso algunos tramos en los que la pendiente es muy fuerte, pero con tomárselo con un poco de calma es suficiente (lo de la calma muy importante, y más esta primavera que el asma me está matando como ya ni recordaba).

Nosotros introdujimos una pequeña variante al itinerario, como la jodida tos a veces me ahoga (literalmente) si subo cuestas muy fuertes, fuimos por una pista forestal que sale a la izquierda de a carretera, a unos 500 m. del cruce de Erill la Vall y entre vueltas y revueltas, muy largas pero de escasa cuesta, te deja en las Bordas de Erill, desde aquí, despacito, ventolín en mano, hasta la Collada de Basco y la cumbre (odio la primavera leches).

El descenso lo hicimos por el camino normal que parte de Erill la Vall, mucho más directo, pero más pendiente y a ratos bastante desdibujado (aunque bien señalizado en todo momento)

Nos encontramos algún chozo en el borde del camino.

La niebla juega con las montañas, mal tiempo estamos teniendo.

El impresionante desprendimiento que hay sobre el barranco de Erill.

Las Bordas de Erill y la redondeada cumbre de la Corona del Pinar.

Vistas al Coll de la Gelada, desde la Collada de Basco (1916 m.).

L´Aut en primer término, Punta Alta y Pala Gespadera detrás, con algo de nieve.

Durro, vistas al Corronco y la zona de Boí-Taüll.

La cumbre de la Corona del Pinar (2068 m.).

Barruera y el Vall de Boí.

La Obaga de Erill.

...Descanso...

Los pueblos de Boí, Taüll, la urbanización del Pla de la Ermita y la zona del Port de Rus.

Erill la Vall, fin de ruta, ya vestido de primavera (para mi desgracia, tanta flor, tanto polen y tanta historia...)