Una cálida noche de Julio, en Arenas de Cabrales, con dos potes de sidra, paquete de Camel y "El Adrados" extendido enfrente nuestro, Mercedes y yo planeábamos la ruta del día siguiente, en una de esas noches en que el humo y el alcohol se meten dentro del alma en un deseo de huir de todo.
Un par de copas más en El Chibiski brindando por el desencanto, unas cuantas risas a costa de la vida, "¡Que vida más tonta!", y al día siguiente, a las 7.45, iniciábamos el día en los Invernales del Texu, medio dormidos y todavía con media sonrisa boba dibujada en la cara.
Invernales del Texu, menos mal que el día no pinta demasiado cálido.
Invernales de La Terenosa, nuestro objetivo aún muy lejanooooo
El Urriellu y El Neverón de Urriellu.
El Diente del Urriellu, tras superar La Brecha de Los Cazadores.
Vistas desde Corona el Rasu.
Cumbre de La Párdida, mirando hacia El Llambrión.
Hacia Peña Vieja, con el Alto Carrión de telón de fondo.
Torre Cerredo y Cabrones.
La niebla cubriendo los valles poco a poco.
Después de permanecer un rato en La Párdida, decidimos subir al Neverón, es como si el cansancio de la noche hubiese desaparecido y nos surgieran fuerzas de la nada; ¡lo que aguanta el cuerpo, joer!
"El Picu" desde el Neverón
La Párdida y Torre Cerredo.
La cresta que conduce a la segunda cumbre del Neverón
Atardece sobre El Urriellu
Niebla de tarde en Pandébano, nos tumbamos a reponer fuerzas para encarar el último tramo de bajada...
El Cuetu Teyau
Y la ruta realizada......
No hay comentarios:
Publicar un comentario